CAPÍTULO 2
Después de caminar hasta que uno de los soles del extraño planeta se
ocultó tras el horizonte, salieron del bosque y llegaron a un
pequeño poblado. Pequeñas chozas
circulares construidas de algún material parecido al adobe y con tejados de corteza de árbol, se disponían de forma totalmente
errática a cada lado de un pequeño estanque de aguas transparentes. Leo avanzaba despacio
cojeando levemente después
de la larga caminata mientras la imponente criatura que lo había capturado sujetaba la cuerda que rodeaba su cuello sin tensarla.
Cuando llegaron junto al estanque, el hombre felino se arrodilló y bebió como haría
una hermosa pantera, acercando
la boca a la superficie cristalina y recogiendo el agua con la lengua. Luego, se incorporó y le indicó con un gesto que podía beber él
también, así que el joven humano,
se inclinó y haciendo hueco con las manos bebió con ansia el fresco líquido.
El hombre
gato, le miró curioso y luego, bufó con burla ante su gesto delicado.
En ese
momento, salió otro hombre gato de una de las chozas y se acercó a ellos mirando asombrado a Leo.
El felino
que era su dueño, emitió una especie de maullido que Leo interpretó como un saludo e intentó seguir adelante, pero el otro se
colocó junto al joven y comenzó
a olerlo con avidez. Leo se apartó cuando notó los dientes afilados rozando uno de
sus pezones y el hombre gato que lo había capturado y al que había puesto el nombre de Mau porque era lo más parecido a una palabra que
había oído de sus labios,
le dio un manotazo para apartarlo de su presa. Después tiró con suavidad de la cuerda
para continuar caminando pero el otro felino saltó sobre Leo mordiéndole en el hombro
y clavando sus afiladas uñas en su carne desprotegida. El humano lanzó un grito de dolor y Mau se giró con una velocidad prodigiosa y se abalanzó sobre su contrincante
con una furia estremecedora. Los dos gatos comenzaron a morderse y arañarse
entre rugidos de cólera y Leo se apartó apresuradamente para alejarse del remolino
de garras y dientes en que parecían haberse convertido los dos alienígenas.
El joven terrestre deseaba fervientemente que ganara Mau
pues a pesar del poco
tiempo que llevaban juntos se había dado cuenta de que la criatura no carecía
de amabilidad
y, con él se sentía relativamente seguro.
La pelea continuó durante un rato que le
pareció eterno a Leo pero, al fin, Mau se levantó vacilante y dándole un zarpazo final al otro felino,
se volvió hacia él. Por señas le indicó que se acercara y el humano obedeció
mirando al hombre gato derrotado
que se estaba lamiendo las heridas con aspecto ofendido. Caminaron hasta la última
choza del poblado y Mau le hizo entrar en ella. Luego, cerró la puerta hecha con
largos tallos de color azul oscuro y se sentó sobre una ancha estera del mismo material.
Leo, estaba tan cansando que se desplomó a su lado y cerró los ojos, pero los abrió
enseguida al notar la húmeda calidez que envolvía el dedo gordo de su pie derecho.
Miró en esa dirección y se encontró con Mau que estaba chupándole el dedo con la misma dedicación que un niño
lamería un trozo de regaliz. Un estremecimiento de
placer recorrió el cuerpo del joven terrestre y se dejó caer en la estera
dispuesto a dejar
que el hombre gato hiciera con él lo que quisiera.
Mau, le miró y comenzó a ronronear mientras su lengua áspera y caliente le empezaba a lamer el resto del pie.
El
extraño hombre continuó lamiéndole con una meticulosidad que nunca habría sido
posible en un hombre terrestre y Leo se sintió inmerso en el placer más
exquisito.
La
lengua recorría muy despacio su pierna sin dejar ni un sólo centímetro de piel
sin lamer
y el ronroneo grave que salía de la garganta de Mau le arrullaba haciéndole olvidar
todo excepto las sensaciones que estaba experimentando en ese momento.
Cuando la lengua de su captor llegó hasta sus muslos, el cuerpo del piloto empezó
a temblar de deseo y su polla se irguió mostrándose en todo su esplendor. El hombre
gato, la miró con asombro y soltó un maullido interrogador. Luego, como había hecho
ya una vez, la tomó en sus labios y la chupó tentativamente. La lengua recorrió con
implacable paciencia cada repliegue, jugueteó con la rajita intentando penetrar
por ella y luego se dedicó a lamer la parte de abajo cuando
las caderas de Leo se empezaron
a mover incontrolables haciendo que la polla entrara y saliera de la boca de Mau.
El felino enseguida se dio cuenta de lo
que deseaba su presa y empezó a succionar con fuerza para arrancarle una vez más ese
delicioso líquido que había probado
ya. La presión de los labios de Mau sobre su polla fue demasiado para Leo que eyaculó con fuerza en su boca. El hombre gato, paladeó
el semen con placer y después
de tragarlo se lamió los labios como si fuera un muchachito goloso. Luego, se tumbó al lado del humano y le rodeó con su brazo
protectoramente antes de quedarse dormido.
Hola, debo decir que junto el libro del saber esta es la que más me ha llamado la atención de todas tus historias. Estoy deseando ver como la desarrollas. Muchas gracias.
ResponderEliminarGracias a ti por dar tu opinión y me alegra que te gusten las historias, en cuanto pueda iré escribiendo más.
ResponderEliminarHola me encanta y ya me gustaria que estubiera terminado para leerlo,
ResponderEliminarde un tiron, besos
Muchas gracias, Mª Luisa. Me alegro de que te guste la historia e intentaré actualizar pronto. Besos.
ResponderEliminarHola Minu! Esta muy bien esta historia, alienígenas y terrestres, muy interesante. Me encanta Mau un lindo y curioso gatito y creo que Leo no se aburrirá con él jajaja Gracias por compartirla y miles de besoss guapísima
ResponderEliminarHola, Pilarín, a mi también me gustan mucho los gatitos y ya me gustaría tener a uno así que me lama y me dé calorcito, jajaja.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarHola, Billy. Ya está arreglado el enlace, gracias por avisarme y espero que te guste. Besoss.
EliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarQué bien que te haya gustado, Billy. En cuanto pueda me pondré con ella. Besoss.
EliminarEs la primera vez que te escribo...
ResponderEliminarMe encantan tus obras publicadas. Pero quisiera acerté una pregunta
¿Cuándo vas a publicar el cap. 3 de relaciones extrañas?
E estado esperando desde meses pero no pasa nada y muero por saber lo que sigue
A si que por favor de la manera más humilde te pido que la continúes...
Te estaré hostigando cada cierto tiempo para que no se te olvide ya que es mi historia favorita hasta el momento...
Me gusta tu historia, cambiaformas y alienígenas, mis preferidas, pero veo que está parada desde hace tiempo. Continua, por favor, está muy bien....
ResponderEliminarhola ^o^me encanta este tipo de historias no se q esperar , continua lo pronto y seguido q ya llevo releyendo cada ves q entro U_U y no hay contiX_X .Y tus dos personajes quiero ver como llegaran a comunicarse >"< .
ResponderEliminarMe encantó!
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